La situación en las fronteras misioneras se complica debido a las asimetrías comerciales

Crecen las filas de argentinos cruzando la frontera hacia Brasil por asimetrías comerciales.

La situación en las fronteras misioneras se está volviendo cada vez más compleja a medida que las asimetrías comerciales entre Argentina y Brasil favorecen a los comercios del vecino país. Un número creciente de argentinos, no solo residentes en zonas limítrofes sino también de ciudades más alejadas como Eldorado, cruza a diario a Brasil para realizar compras, lo que está afectando de manera significativa a los comerciantes locales.

Aumento en el cruce de argentinos hacia Brasil por productos básicos

Históricamente, los argentinos que cruzaban a Brasil buscaban artículos de indumentaria y electrónica, pero en los últimos meses la tendencia ha cambiado. Ahora, los consumidores buscan también productos de primera necesidad como alimentos, artículos de limpieza, perfumería y materiales de construcción. Este fenómeno se ha visto especialmente marcado en las localidades fronterizas, donde la diferencia de precios se ha vuelto un factor decisivo.

En San Pedro, uno de los municipios más afectados debido a su proximidad a dos pasos fronterizos con Brasil, la situación es crítica para el comercio local. La devaluación del real, que se cotiza a $200 por unidad, ha convertido las compras en Brasil en una opción sumamente atractiva para los consumidores argentinos.

El presidente de la Cámara de Comercio de San Pedro, Raúl Añais, describió el panorama de los comercios locales como «verdaderamente grave» y advirtió que el escenario podría empeorar en los próximos meses. «El poder adquisitivo se va a Brasil, lo que se suma a la crisis yerbatera y la escasez de trabajo, afectando aún más al comercio», señaló.

Los comercios de Bernardo de Irigoyen también en alerta

Bernardo de Irigoyen, la ciudad más oriental de Argentina y con frontera seca con Brasil, enfrenta una situación similar. En lugar de brasileños cruzando para aprovechar los precios argentinos, como solía ser común, hoy son los misioneros quienes cruzan masivamente hacia Brasil para realizar sus compras. Los productos más demandados incluyen alimentos como carnes, frutas y verduras, así como ropa y materiales de construcción.

Walter Feldman, presidente de la Cámara de Comercio de Bernardo de Irigoyen, ya había advertido sobre esta situación meses atrás. Feldman destacó que, además de la ventaja económica, los consumidores argentinos son atraídos por las estrategias de ventas de los comerciantes brasileños, que incluyen promociones y ofertas especiales, así como la reconocida amabilidad del vendedor brasileño.

El impacto en ciudades más alejadas de la frontera como Eldorado

El fenómeno no se limita a las zonas fronterizas. En Eldorado, ubicada en el centro-norte de Misiones, los comerciantes también sienten el impacto de las asimetrías comerciales. Según Ramón Alfredo Otto, presidente de la Cámara de Comercio de Eldorado, los consumidores locales no solo buscan productos en Brasil para su uso personal, sino que incluso algunos almacenes barriales ya ofrecen productos traídos del país vecino.

«Lo que más nos sorprende es que la gente no está comprando solo para consumo propio, sino que vemos productos brasileros en los comercios locales. Se han organizado caravanas o tours de compras, lo que agrava la situación», explicó Otto. Los rubros más afectados son los de la canasta básica, la indumentaria y la construcción, sectores clave para la economía local.

Preocupación en el sector comercial ante la cercanía de las fiestas

Los representantes de las cámaras de comercio en las distintas localidades de Misiones coinciden en su preocupación por el impacto que estas asimetrías comerciales están teniendo en la economía local, especialmente en un período en el que se esperaban mejoras en las ventas debido a las festividades de fin de año. Sin embargo, el repunte no se ha materializado y las expectativas del sector se ven cada vez más afectadas.

La situación en las fronteras misioneras refleja los desafíos que enfrentan las economías locales en un contexto de desigualdad cambiaria, lo que exige respuestas urgentes por parte de las autoridades para evitar el deterioro aún mayor de los comercios en la provincia

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