Las lluvias dejan un saldo trágico en Bahía Blanca
El feroz temporal que golpea a Bahía Blanca ha dejado al menos 10 muertos y más de 1.300 evacuados debido a las intensas inundaciones que mantienen a la ciudad en estado crítico. Con calles anegadas, barrios enteros bajo el agua y un daño estructural severo, las autoridades advierten que la cifra de víctimas podría aumentar en las próximas horas.
El impacto del temporal también provocó la suspensión del transporte público, cortes de energía y el colapso de viviendas y comercios. Mientras tanto, la comunidad sigue luchando contra la crecida del agua, en una de las peores tormentas registradas en la historia de la ciudad.
Solicitan declarar la emergencia en Bahía Blanca y la región
Ante la gravedad de la situación, legisladores nacionales han presentado un proyecto de ley para declarar la emergencia ambiental, económica y habitacional en Bahía Blanca, Coronel Rosales y otros municipios afectados.
La iniciativa cuenta con el respaldo de figuras como Victoria Tolosa Paz y Diego Santilli, quienes han exigido al Gobierno Nacional una respuesta inmediata para asistir a los damnificados y reparar la infraestructura dañada.
“La prioridad es brindar asistencia a las familias y garantizar la reconstrucción de la ciudad”, afirmó Tolosa Paz, quien remarcó la urgencia de medidas financieras y técnicas para mitigar los efectos del desastre.
El Gobierno Nacional y Provincial actúan ante la crisis
El presidente Javier Milei ha puesto en marcha un operativo conjunto con las autoridades provinciales para atender la emergencia en Bahía Blanca. El ministro de Defensa, Luis Petri, y la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, viajaron a la zona para coordinar tareas de rescate y evaluar los daños.
Desde sus redes sociales, Bullrich destacó el trabajo de las fuerzas de seguridad y rescatistas, señalando que “el compromiso con los afectados es total”.
Por su parte, el gobernador Axel Kicillof calificó el desastre como una “tragedia climática”, subrayando que en apenas 12 horas llovieron más de 300 milímetros, cuando la media anual de precipitaciones en la ciudad es de 600 mm.
“Estamos ante una situación desesperante”, declaró Kicillof, detallando que los equipos de emergencia han estado trabajando sin descanso para evacuar a las personas atrapadas y garantizar atención médica a los damnificados.
Una ciudad devastada que busca recuperarse
El impacto de la tormenta en Bahía Blanca ha sido catastrófico. Las imágenes de calles convertidas en ríos, viviendas destruidas y personas evacuadas reflejan la magnitud de la crisis.
Mientras el agua comienza a descender, la comunidad enfrenta el enorme desafío de reconstruir lo perdido. Con el respaldo del Gobierno Nacional y Provincial, las tareas de asistencia continúan en marcha, pero el camino hacia la recuperación será largo y complejo.
La incertidumbre persiste, pero la solidaridad y el esfuerzo colectivo serán clave para que Bahía Blanca pueda salir adelante tras una de las peores inundaciones de su historia.